Querida fotografía

Para terminar el mes, os paso el enlace de una de las páginas más emotivas que he visitado en tiempos. De la misma forma que ocurre en AFP, no puedes dejar de ver fotos de extraños, imágenes sujetas con una mano y acompañadas de  unos pequeños párrafos que empiezan con "Dear Photograh,...". La idea parte de un joven de 22 años llamado Taylor Jones que hace unos cuatro meses cogió una foto antigua de su hermano desayunando en la cocina, realizada en papel, y sujetándola con una mano, la hizo coincidir con el mismo fondo en la actualidad. Así empezaba una historia que ha conseguido convertirse una de las webs más exitosas de 2011 (#7 de acuerdo a Time), pero sobre todo una de las más bellas. Hay ideas similares pero el efecto vintage-recuerdo sumado a la terrible fuerza de algunos párrafos explicativos ha llevado a Dear Photograph a convertirse en un sitio de culto. Por que en el fondo nos recuerda que estamos de paso, que nada nos conmueve más que nuestras propias emociones, que ninguna crisis del mundo nos hará olvidar nuestros recuerdos más queridos y que, una vez más, las mejores cosas de la vida son o han sido gratis: estar cerca de la gente amada y compartir con ellos la vida, reflejada en este caso en una vieja foto. Os invito a que paséis por Dear Photograph y os emocionéis, si es el caso, con algunas de las fotos que allí residen. Por mi parte, os enlazo tres de ellas:

Dear Photograph,
No matter how messy life gets I will always be a 4 year old boy at heart.
Braeden

Querida fotografía, no importa lo complicada que se ponga la vida, siempre seré un niño de 4 años dentro de mi corazón

Dear Photograph,
Why can’t I feel all the color that Hallowe’en used to bring me? It’s hard to see the magic through grown up glasses…
Paisley

Querida fotografía, por qué no puedo sentir todo el color que Halloween me traía? Es duro ver la magia a través de unas gafas de adulto...

Dear Photograph,
It’s comforting to know, that after 20 years, my place at the table is always waiting for me when I return home.
Juliana

Querida fotografía, es reconfortante saber que, después de 20 años, mi sitio en la mesa siempre me está esperando cuando vuelvo a casa.