Susín, donde la soledad no duele

Hay veces en las que encuentras lugares que tienen algo especial, pero no sabes explicar el por qué. No soy el único que ha sentido que un pequeño pueblecito del sobrepuerto llamado Susín, prácticamente deshabitado, ejerce un magnetismo que te lleva hasta él tarde o temprano y donde, sin pretenderlo, te encuentras a gusto. Susín es un pueblecito con un par o tres de casas, edificaciones auxiliares adicionales y una bonita iglesia del siglo XI, situado en un entorno privilegiado que domina el valle del Gállego.

Llegar a Susín no es difícil. De hecho mucha gente que ha recorrido la carretera entre Sabiñánigo y Biescas, en la provincia de Huesca, ha visto este pueblecito a través de unas casas que se adivinan en lo alto del monte al pasar junto al pueblo de Oliván.

Para llegar a Susín hay varios caminos, igual de bonitos e interesantes. El primero parte de Oliván. Hay que atravesar el pueblo y tomar la pista que sigue hacia los otros pueblos del sobrepuerto (Ainielle, Aineto, etc.). Tras cinco - diez minutos de andar por la pista encontrareis esta señal que indica una senda que inequívocamente y tras un cuarto de hora de subida por un bosque precioso nos lleva a Susín.

El segundo camino parte de Lárrede, pueblo al que merece la pena ir sólo por admirar su preciosa iglesia del románico del serrablo. También desde el pueblo existe una indicación que marca una senda que nos permite llegar sin problemas a Susín. Angelines Villacampa, que mantiene habitada la casa Mallau, se dedica entre otras muchas cosas a mantener los caminos a Susín limpios, accesibles, incluso bonitos.

Y es que la tenacidad de esta mujer, que hace tanto por que el pueblo sea un lugar acogedor, creo que es uno de los puntos clave para entender por qué Susín, siendo tan parecido a tantos otros pueblos del Pirineo, genera una simpatía especial. Recuerdo que la primera vez que supe de la existencia de Susín fue a través del mravilloso libro de Jose Luis Acín en el que se repasan los pueblos abandonados de la provincia de Huesca. Una imagen preciosa tomada desde dentro de la iglesia del pueblo y unos comentarios especiales sobre su ubicación me hicieron soñar con subir a aquel lugar cuanto antes.

Tardé casi dos años en subir desde el día que me lo propuse. Siempre había algún motivo (la lluvia, un problema inesperado, la pertinaz pereza) que hacía que no pudiera ir. Finalmente, en el mes de Julio de 2002, y tras fracasar un intento de ir a otro sitio, me acordé y, como estaba cerca, subí a Susín.

Esta es una de las imágenes que más me gusta de Susín. Al fondo, casa Mallau, donde Angelines vive sin agua corriente, sin luz (salvo por un pequeño grupo electrógeno) al estilo tradicional. Gracias a ella el pueblo no está completamente deshabitado. Recuerdo que fui a ver Susín el día de Santiago, y ella estaba haciendo la comida en el fuego de la maravillosa cocina que mantiene al más puro estilo tradicional del pirineo aragonés. Su mayor ilusión era que oliera en el pueblo a fiesta, que no murieran los olores de las personas en Susín.

Las vistas del valle del Gállego desde Susín son excepcionales. La carretera Sabiñánigo-Biescas se aprecia perfectamente desde el pueblo y permite una sensación curiosa, de estar realmente tan cerca de la civilización, de los miles de personas que suben a esquiar los fines de semana de invierno al valle de Tena, y por otro lado estar tan lejos mental y anímicamente, en la soledad de un lugar donde realmente no duele estar solo.

Pero ya dijo alguien en su día que no es bueno que estemos solos. Subamos pues a Susín a pasar un rato, unas horas acaso, relajémonos en un entorno alejado de cualquier prisa y admiremos de paso su iglesia románica del siglo XI. Miremos esa ventana doble que tiene mil años y fijémonos en las piedras labradas con motivos celtas, indicativo de que este lugar ya fue centro espiritual de gentes hace muchos, muchos años.

Espiritualidad que, si se me permite, aun permanece allí en lo alto del monte. No teneis más que experimentarlo.


Epílogo

Finalmente, volví a Susín con mi familia en el otoño de 2009. Para nuestra alegría, Angelines seguía allí. Luchando por mantener en pie una idea, más que un pueblo. Gracias a una página web que hice hace tiempo, y ahora desaparecida, algunas personas habían sabido de este pequeño lugar y de la lucha por evitar que se muriera del todo. Prometí a Angelines que volvería a hacer una entrada sobre el lugar donde la soledad no duele, para mantener apenas viva esa llamita que hace que el fuego no se apague del todo. Un poquito tarde, pero aquí está.

Comentarios

  1. Las fotos son preciosas. Me han entrado unas ganas de ir... igual en verano me subo un domingo.

    Vaya fotazos haces...

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  2. Gracias Fer, me alegro. Y sube que merece la pena.

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  3. Hola, Bonitas fotos, me acuerdo que de joven subíamos a Susin con mis hermanos y mis abuelos, donde entonces, allá por los 90 aun habían algún ganadero en el pueblo con sus ovejas y vacas, que aprovechaban el buen pasto que hay cerca de la hera, recuerdo la pequeña fuente en la que bebíamos a la izquierda del pueblo cerca de un gran manzano que daba unas pequeñas manzanas, En esa época ya estaba Angelines intentando rehabilitar ciertas partes del pueblo y cultivando lo que podía en un huerto cerca de la iglesia, hace no mucho subimos en todo terreno por la pista forestal, 20 años habían pasado y no en valde, y allí estaba Angelines, que no nos reconoció a la primera, le comentamos quienes eramos y entonces se alegro mucho, estuvimos hablando unas horas muy agradables y viendo todos los progresos que se habían logrado en 20 años...
    Nos fuimos muy contentos por revivir nuestros recuerdos de niños, y por hablar con ella pues hacia muchos años que no la veíamos.
    Desgraciadamente hace no mucho Angelines murió, meses después de visitarla.

    http://www.pirineodigital.com/noticia.php?idnot=1320

    Desde aquí quiero dar mi pésame a sus hijos, Puede que su obra no dure para siempre pero Susín si lo hará, sus piedra estarán allí para hacerle ver a alguien que antaño vivió gente.

    Animo a la gente que valla a verlo, nhtg si pudieras ves a verlo una vez mas, quizás pasen los años y los caminos se pierdan y Susin vuelva a estar como hace años, casi inaccesible.

    Una vez mas gracias por las Fotos y tus palabras.

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    Respuestas
    1. Hola! Lo primero gracias por comentar. Me has vuelto a poner la carne de gallina. Sabía que Angelines había fallecido, e incluí una entrada en febrero de 2013
      http://nhtg.blogspot.com.es/2013/02/angelines.html
      Tengo que volver un día de estos a Susín y volveré a hacer fotos y a subirlas y a recordarlo… en cualquier caso es una maravilla saber que hay gente que no va a dejar que el legado de Angelines se pierda, la asociación Mallau de amigos de Susín sigue reblando para que no se pierda la llama (http://www.mallau.org). Un saludo y gracias otra vez por pasarte y comentar!

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