Drivers II: la historia continúa

Por casualidades de la vida, me he encontrado con una entrada de este mismo blog de 23 de mayo de 2012. En ella contaba un poco mi historia con la fotografía y los drivers, las motivaciones que me hicieron comenzar y me hacían seguir dedicando tiempo y dinero a esta afición que tengo que es la fotografía. 

Acababa la entrada con esta frase: "¿Y qué vendrá después? No lo sé. Me gustaría que una exposición, seguir fotografiando en el estudio personas y cosas, y decidirme de una vez por llevar adelante algún proyecto concreto."

Es un tanto espeluznante leer algo que escribiste hace seis años y que se ha cumplido sólo a medias...

Con respecto al estudio, dejamos con mi colega Álvaro de financiar un espacio que sólo utilizábamos de vez en cuando (aunque con mucho aprovechamiento) y desde entonces si tengo que hacer estudio suelo alquilar uno en la zona de la Magdalena... conservo parte de los flashes y alguna que otra vez los desempolvo para algún encargo. El driver en este caso no continuó, y aunque tengo fotos de estudio que me han gustado mucho no es el tipo de fotografía que me motive especialmente (la verdad, me gusta más la luz natural para todo).

La exposición sí que vino. Previamente, en el año 2013, adquirí mi Nikon D600 que es con la que tiro desde entonces. Pasar del formato DX al Full Frame con 24 megapíxels fue un cambio tremendo en cuanto a calidad (sobre todo rango dinámico y ruido) y tuve que admitir que semejante resolución precisaba de objetivos (lentes) que le sacaran partido: poco a poco vinieron el Nikkor 16-35 f4 y el Nikkor 70-200 f4, dos lentes intermedias entre las de consumo y las pros, pero que tienen una resolución que hace brillar el sensor de la D600. La cuestión es que esta cámara la compré en Hong Kong, en un viaje de trabajo, donde me di cuenta de que la fotografía de ciudades era una constante en mi vida, aunque sólo fuera porque la mayor parte de mis viajes de trabajo era a ciudades concretas en las que aprovechaba, en el mejor de los casos, un día en hacer fotos.

Así que la exposición se llamó 'Ciudades con alma', título que me regaló mi amiga Eva, y que tuvo 37 fotografías de ciudades en estricto blanco y negro durante tres semanas colgadas en la Fundación San Valero. El contacto me lo pasó mi re-cuñado Chesús Domper, cuyas espectaculares fotos podéis ver aquí.  La exposición estuvo bien, así que me quedé satisfecho, pero el follón diario en el trabajo y mi pertinaz modestia hicieron que la cosa quedara ahí. Ciertamente vendrá otra exposición, pero aún queda trabajo.

Lo que sí que es un driver en mi afición fotográfica es mi proyecto sobre Aragón que os comentaba hace unas entradas. Pensado a finales de 2015, va mucho más lento de lo que yo querría, pero al menos me sirve para saber qué quiero hacer.  Es un auténtico proyecto, pero necesita de mucho tiempo porque no es algo que vaya a poder acabar en unas semanas. Así que de vez en cuando es el auténtico motivo por el que cojo la cámara y salgo a tirar fotos. Porque motivarse con la fotografía es complicado en la era de internet: ver las impresionantes fotos de cualquier persona del mundo vía tu pantalla de ordenador (o de móvil en la era de instagram) es una gozada por una parte, pero por otra es tremendo tener que compararte con los mejores del mundo de forma continuada. ¿Qué puedo hacer que llame realmente la atención?

Terminaré con otras dos motivaciones que a mi me sirven: una es la de editar las fotos como a mi me gusta. Preferiblemente en blanco y negro, pero también en color. Conseguir un efecto que incluso antes de terminar la foto no hubiera imaginado. Es, algunas veces, como tirar una nueva foto sobre la foto anterior. Editar las fotos no me cuesta nada, de hecho me gusta mucho. Y me resulta enormemente gratificante en muchos casos.

La segunda es la de tirar panoramas con el móvil. Las fotos del móvil están bien (llegué incluso a hacer una ciudad sólo con el móvil) pero la posibilidad de hacer panoramas me flipa. No siempre salen bien, pero los panoramas tienen una estética que me gusta muchísimo. Lo más es hacer street photography en panoramas, pero para eso necesitas una máquina especial... o recortar las fotos :-P

Bueno esto es todo. Sigo teniendo mis drivers, sigo haciendo fotos y ver crecer mi proyecto anima bastante. Espero poder en un tiempo razonable mostrar algo en público y vía este sufrido blog. Hasta entonces, lo que pueda ir mostrando.